Los expertos denuncian un importante incremento de estos ácaros a los que también ha favorecido la falta de desbroce y un invierno de temperaturas suaves
La presencia de hasta cuatro tipos de garrapatas en Castilla y León se ha incrementado en los últimos años con motivo de las condiciones meteorológicas, a las que este año se añaden las circunstancias derivadas de la pandemia del coronavirus. «Es evidente que muchos ayuntamientos no han podido desbrozar zonas de sus términos municipales y eso favorece la presencia de garrapatas», explica Eugenio Sánchez, agente medioambiental de la Junta de Castilla y León, que trabaja en la zona de la comarca de Tordesillas.
Decenas de caminos han desaparecido por la falta de uso en los últimos meses, tomados por la maleza, y hasta la Senda del Duero o GR-14 (sendero de gran recorrido) se encuentra «estrechado» en muchas zonas de la provincia de Valladolid debido al espesor de las plantas, que por norma general superan los 40 centímetros de su altura habitual, tras la primavera más lluviosa de la última década, que también ha ayudado a la proliferación de garrapatas.
Fuente: El Norte de Castilla
Más historias
Los “picaderos” de Ávila al descubierto.
Un maestro de la carne para el Palacio de Ortigosa
Empresarios Sevillanos invertirán 2 millones de Euros en Ortigosa del RioAlmar